Aunque para muchos las gafas de sol siguen siendo un complemento de moda, cada vez mas personas toman consciencia de la importancia de llevar gafas de sol como protección ante el sol.
Muchas veces pensamos que para protegernos del sol solo necesitamos que el cristal sea bien oscuro, pero eso puede ser un error si el cristal no tiene la protección UV adecuada para ello. En otro post hablaremos de ello en profundidad.
Entonces, ¿No es importante la intensidad de color para la protección de la vista?
Lo es, pero no para evitarnos el factor UV, si no para la luminosidad que deja pasar el cristal. Para medirlo existe una escala del 0 al 4:
- Filtro 0 o de luminosidad atenuada. Son los cristales más claros del mercado. Dejan pasar entre el 80% y el 100% de luz solar a los ojos. Su protección no es real ni efectiva y solo tienen una función estética. Se recomienda el uso en interiores y ambientes oscuros, nunca a pleno sol.
- Filtro 1 o de luminosidad contrastada. Son lentes claras, pero ligeramente coloreadas. Se utilizan en ambientes de luminosidad solar ligera y permiten el paso de entre el 44% y el 80% de la luz.
- Filtro 2 o de luminosidad media. Se trata de cristales medianamente coloreadas usadas para una luminosidad media o estándar. Dejan pasar entre el 19% y el 43% de luz solar.
- Filtro 3. Son cristales muy coloreados y oscuros. Su uso se puede dar en aire libre, tanto en playa como en montaña. Solo dejan pasar entre el 9% y el 18% de luz.
- Filtro 4. Son los cristales mas oscuros que hay y solo se recomiendan para gente que hace deportes acuáticos, esquí o alta montaña. Estos dejan pasar entre el 3% y el 8% de la luz solar. No se recomiendan para conducir, pero si se recomiendan para gente que ha sido operada de cataratas u otros problemas de visión.
Color de los cristales de sol
Si es cierto que el color también nos puede influenciar a la hora de escoger y usar unas gafas de sol.
Dentro de las gamas de colores hay unos que siempre se usan. En esta ocasión hablaremos de estos, ya que son los más comunes:
El color gris es uno de los mas usados ya que permite ver muy bien la gama de colores y ofrece una buena protección a los ojos frente a una fuerte luminosidad.
El color marrón se usa para mejorar contrastes y para aumentar la luminosidad. Se suelen recomendar para gente que tiene un poco menos de agudeza visual, ya que al mejorar contrastes y aumentar luminosidad permite ver un poco mejor.
EL color verde también se usa mucho porque hace la función del gris, es decir, no desvirtúa los colores y ofrece una buena percepción de contrastes.
El color amarillo se usa para conducción nocturna o también para días muy nublados. Este color aumenta el contraste y la percepción de relieves. También es cierto que, al dejar pasar mas luz, reduce la fatiga visual.
Hay que decir que los colores fuera de este ámbito se suelen considerar puramente estéticos y no influyen o no aportan ninguna ventaja al ponerlos.
Protección UV
Hasta ahora hemos visto que el color y la intensidad del mismo son factores a tener en cuenta, pero el verdadero factor importante es la protección que ofrece los cristales de las gafas de sol.
Esta protección viene dada por el filtro de luz UV (Ultravioleta). Estos rayos solares son los verdaderos dañinos y lo que nos debería importar más de unas gafas de sol.
Para considerarse “gafas de sol” estas gafas deberían tener un factor de protección UV de 400.
¿Cómo podemos saber si nuestras gafas llevan el factor de protección UV 400? Hay varias formas de saberlo. La mas sencilla es mirar la varilla de la montura. Normalmente pone UV400, pero puede haber varillas en las que no lo ponga.
En el caso que salga en la varilla lo mejor es llevar las gafas de sol a tu óptica de confianza para que lo miren. Allí podrán determinar si los cristales de sol son aptos para llevar o no.
Finalmente lo podemos saber de forma casera si tenemos una linterna de luz UV. Solo hay que enfocar la luz UV hacia el cristal y ver si pasa algo de luz UV. Si no pasa luz es que la protección es correcta.